La crisis sanitaria ha impulsado el crecimiento del comercio electrónico en los sectores de alimentación, belleza, formación o deporte, según indica la compañía Minsait, consultora perteneciente a Indra. A su vez, los grandes mercados que lideraban el tráfico en la red, como es el sector del turismo y cultura, han llegado a desaparecer ante el cierre de su actividad.
A pesar de que el consumo online se atascó en un principio, la situación ha llegado a cambiar hasta el punto de que se han registrado fuertes movimientos en la demanda online a mediados de marzo. Por ejemplo, el mercado del gran consumo, que hasta el momento no sumaba más de un 2% de la venta global online, ha conseguido sobrepasar cualquier previsión en sus canales de comercio electrónico para este año.
En concreto, la demanda de alimentación, bebidas y cuidado personal y del hogar ha alcanzado un crecimiento del 286% en la semana posterior a la Semana Santa, según indica Nielsen. Como resultado, el comercio electrónico se ha duplicado un 2,1% en la cesta de compra de los españoles.
Aunque se han registrado crecimientos, la crisis sanitaria podría traer consigo descensos del 30% y del 50% en las ventas online durante el resto del año, por causa del impacto negativo de las agencias de viaje, hoteles, alojamientos, además del sector retail tradicional o productos culturales, según indica Minsait. La tendencia hacia la reducción del tráfico en la red también se verá afectado por factores como la disminución en la capacidad de consumo, el distanciamiento social, o las limitaciones en viajes y desplazamientos.
Aún así, son muchas las compañías que se esfuerzan por cubrir la demanda online. Recientemente, la cadena de suministro El Corte Inglés ha convertido uno de sus centros comerciales en un almacén para cubrir la demanda de e-commerce
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